Arnoldo Gabaldón: Un hombre fundamental en la lucha contra la malaria
Los estragos que causó la malaria en Venezuela fueron enfrentados gracias a los aportes del médico Arnoldo Gabaldón.
Venezuela ha sido siempre cuna de grandes profesionales y en el campo de la medicina no es la excepción, allí se encuentran figuras como la del doctor Arnoldo Gabaldón que por muchos es considerado uno de los epidemiólogos más importantes y destacados del siglo XX en el país.
Galbadón nació el 1ero de marzo de 1909 en la ciudad de Trujillo, en el estado del mismo nombre. Muchos fueron los aportes que hizo a la ciencia, pero sin duda el más reconocido es su ataque contra la malaria, de hecho, se considera que entre 1950 y 1960 organizó la primera campaña nacional en el mundo contra esta patología.
Se cuenta que el médico estaba impactado por los estragos que hizo la malaria en Venezuela y en medio de esa preocupación conversó con el doctor Enrique Tejera, quien le sugirió viajar al exterior para realizar los estudios necesarios para enfrentar la enfermedad.
Luego de que Juan Vicente Gómez dejara el poder, en 1936, el general Eleazar López Contreras creó el Ministerio de Sanidad y Asistencia Social y nombró al doctor Enrique Tejera como responsable de esta cartera; posteriormente, recibió un telegrama del mismo mandatario para que formara parte del equipo que lideró la lucha contra la malaria.
Justo cuando los casos de malaria se desbordaban en el país, López Contreras nombró a Gabaldón como jefe de malariología del ministerio de Sanidad; se encargó de preparar un equipo para que ayudaran a combatir la enfermedad del país, además promovió la entrega de Quinina, un tratamiento que se dio sin cobrar a las personas.
Así pasó el tiempo y entre tropiezos y repuntes de contagios, el doctor Gabaldón logró en cinco años reducir las muertes a un hito de 8,5 por cada 100.000 habitantes; tan grande fue el aporte de este médico trujillano para su país que incluso la Organización Panamericana de la Salud certificó a Venezuela como el primer país en registrar más de 400.000 kilómetros cuadrados libres de la malaria, lo que además se convertía en el área más extensa del mundo.